- Año: 2014
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Fotografías:Jeff Goldberg/ESTO
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Proveedores: Bradley Corporation USA, Ferguson, Ferguson Enterprises, Union Church Millworks, Zurn
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Descripción del programa
El design/buildLAB es un programa de aprendizaje experiencial basado en proyectos centrado en la investigación, el desarrollo y la aplicación de métodos de construcción y diseños arquitectónicos innovadores. Los estudiantes colaboran con comunidades locales y expertos de la industria para concebir y realizar obras construidas de arquitectura que son educativas y de caridad en su naturaleza. Las aspiraciones del programa son al mismo tiempo reforzar conocimientos y habilidades necesarias para la práctica de arquitectura exitosa y significativa de los estudiantes y apoyar los esfuerzos de desarrollo en las comunidades al enriquecer la calidad de su entorno construido.
Al enmarcar la oportunidad para los estudiantes de arquitectura de hacer una diferencia en la vida de una comunidad, el design/buildLAB muestra a los estudiantes el impacto positivo que puede hacer la Arquitectura y los inspira a una ética profesional elevada.
Descripción del proyecto
El Sharon Fieldhouse se ubica en una colina definida por una serie de campos de béisbol aterrazados. Marca la tierra como una incisión lineal que atraviesa el sitio y sirve como un eje principal de circulación peatonal. El edificio está fisurado en tres elementos para permitir la circulación del sitio alrededor de los espacios ocupados. La entrada al proyecto es un arreglo de pasos de cemento masivos, sirviendo como una procesión alegre y un espacio de encuentro informal. Los espacios dentro de la incisión son delineados por pantallas verticales de acero que se abren y varían en su densidad para crear diferentes niveles de privacidad. Puertas pivotantes monolíticas incrementan la conciencia cuando se pasa de la extrema apertura del sitio a la privacidad de los baños y la cocina. Vidrio laminado blanco baña los espacios interiores con luz natural pareja. Anidado entre la cocina y los baños, un pabellón de sombra se desliza fuera de la línea, que ofrece un descanso fresco con vistas al campo. La apertura de las pantallas permite brisas que atraviesan, así como vistas a las montañas de los alrededores. El espacio del pabellón se escalona hacia el campo con una serie de terrazas para sentarse con hierba en facetas, invitando al espectador a sentarse y disfrutar del juego. A medida que la incisión alcanza el bosque, en el borde del sitio, se disuelve suavemente en un pantano de filtración de agua de lluvia hundido. Por la noche, puntos de luz blanca emergen como una constelación en el cielo raso de roble aceitado. En este rico paisaje natural, formas transparentes y detalles sutiles imbuyen la arquitectura con una presencia pacífica, un ambiente mágico para reuniones de la comunidad.
Colaboración
El Sharon Fieldhouse es un emprendimiento caritativo que fue diseñado y construido por 15 estudiantes de tercer año de Arquitectura del design/buildLAB de la universidad Virginia Tech. Después de estudiar la ciudad y trabajar con la comunidad para desarrollar un programa, los 15 estudiantes hicieron proposiciones individuales de diseño para el proyecto. De ahí, los estudiantes unieron de forma iterativa sus propuestas. De esta manera, todos los estudiantes contribuyeron ideas a la discusión. Era imprescindible desde una perspectiva pedagógica que no fuese elegido un "esquema". Por el contrario, todos los estudiantes colaboraron para desarrollar el diseño final del proyecto.
Conciencia social
Clifton Forge, Virginia es representativa de muchas ciudades americanas anteriormente prósperas, luchando por sobrevivir mientras las industrias, que impulsaron su crecimiento, las abandonan. Escondida en un pequeño valle a lo largo del río Jackson, esta ciudad rural de ferrocarril de los Apalaches se enfrenta a retos urbanos graves. Tiendas desiertas, casas vacías e infraestructura en descomposición contribuyen a una sensación subyacente de abandono. Con un ingreso familiar promedio combinado de 30.000 dólares anuales, Clifton Forge necesita instalaciones recreativas y culturales para ampliar las oportunidades para su propio futuro.
El Sharon Fieldhouse fue un emprendimiento de diseño y construcción totalmente voluntario para una pequeña liga sin fines de lucro. Fue dirigido por 15 estudiantes de arquitectura que se organizaron, un equipo de consultores profesionales y un equipo de voluntarios de la comunidad, todos con la aspiración de generar un sentido renovado de lugar al introducir la arquitectura civil vibrante.
Desde la perspectiva de la educación de los estudiantes, el proyecto pretende reforzar los conocimientos y habilidades necesarios para la práctica exitosa y significativa de Arquitectura, abordando cuestiones de conciencia social, liderazgo comunitario, colaboración, creación de consenso y sostenibilidad ambiental.
Desde una perspectiva de desarrollo económico, el proyecto demuestra el potencial de los recursos disponibles a nivel local. Al asociarse con industrias locales incipientes para fabricar componentes de construcción relativamente complejos, fábricas de acero han ampliado su producción CNC, los fabricantes de celosía se han dado cuenta que sus líneas de producción existentes permiten la personalización masiva y aserraderos han encontrado nuevos mercados en carpintería de madera dura de los Apalaches.
Desde una perspectiva de desarrollo de la comunidad, la energía, la creatividad y el compromiso demostrado por los estudiantes reemplaza la desesperación con valor e hizo que la gente se involucre en la revitalización de su propia comunidad. Entre los muchos beneficios de esta aula-comunidad está la afirmación del pensamiento de diseño en hacer lugar: la educación de los arquitectos sobre el valor de la opinión y la educación del público sobre el valor de la Arquitectura.
Gestión ambiental
El proyecto Sharon Fieldhouse toma la posición de que la gestión ambiental no es ni un bien ni una estética; más bien, es un valor que subyace a toda la buena arquitectura. Esta posición sostiene que los problemas medioambientales de nuestra época son problemas de desechabilidad y sobre-consumo, que no se pueden resolver mediante el consumo de más productos, independientemente de lo "verde" que esos productos puedan afirmar que son.
El Sharon Fieldhouse aborda el liderazgo ambiental a través de la durabilidad cultural y física. El proyecto surgió de una necesidad a largo plazo claramente identificada por un centro de recreación juvenil y está construido principalmente de materiales de larga vida útil de origen local y detalles comprobados. Acero al carbono y vidrio se fabrican en fábricas regionales y son 100% reciclables. El roble blanco, entre el más denso y más resistente de las maderas duras de los Apalaches, está extraído de manera sostenible y aserrado localmente. Accesorios de plomería de bajo consumo, iluminación LED y ventiladores inteligentes limitan el consumo de agua y electricidad. Un canal de drenaje asegura que el agua de lluvia vuelva lentamente a la mesa de agua. Y, por último, el ángulo y la densidad de las pantallas de sol aumenta de este a oeste con el fin de invitar al cálido sol de la mañana y al refugio del sol caliente de la tarde.
Prefabricación
La prefabricación es central para el enfoque educativo de design/buildLAB, ya que permite que un solo grupo de estudiantes lidere un proyecto, desde la concepción hasta la realización, y experimente la totalidad del proceso de hacer arquitectura. Los estudiantes prefabricaron La gran mayoría de los componentes de construcción en VA Tech, mientras que los contratistas locales realizaron el trabajo del sitio. Esto permitió que las fases de construcción, que por lo general ocurren en secuencia, sucedieran al mismo tiempo. La eficiencia de trabajar en un ambiente controlado es esencial lograr el programa de un año académico. Los componentes de construcción prefabricados fueron ensamblados en el lugar con una grúa. En total, los estudiantes prefabricaron y ensamblaron la estructura en menos de cinco meses.
El proyecto se construye a partir de 4 componentes principales, cada uno en un material distinto: zócalo de hormigón, pantallas de acero al carbono, paneles de techo de madera y envolventes de vidrio laminado blanco. Los planos para todos los miembros de cada componente se extrajeron de un modelo informático, lo que facilita la prefabricación precisa y eficiente fuera de sitio.
Todos los encofrados de hormigón fueron prefabricados y se transportaron al lugar para verter las terrazas porche, muros bajos, escaleras y losas. Las inclinaciones de acero estructural y pantallas fueron pre-soldadas utilizando una serie de plantillas atornilladas en el sitio, permitiendo que el marco se montara con facilidad y eficacia. Sobras de los principales elementos estructurales se utilizaron para fabricar muebles, como mesas de picnic y una isla de cocina. Los paneles del techo de madera trapezoidal se prefabricaron, transportaron, ubicaron con una grúa, y atornillaron a la estructura de acero. La envolvente de cristal transparente se panelizó, optimizó, codificó y cortó en fábrica para minimizar el desperdicio y agilizar la instalación in situ.
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